EVITEMOS EL MIEDO A CONDUCIR
La falta de experiencia, el tráfico intenso, un susto en la carretera e incluso un accidente pueden provocar amaxofobia. Ante un supuesto así, lo aconsejable es realizar un curso de conducción segura con una escuela solvente que nos ayude a superar tan incómodo temor.
Amaxofobia. Este nuevo palabro ha llegado a nuestros oídos recientemente y, según el diccionario de la RAE, significa temor patológico a conducir un vehículo o a viajar en él, pero no diferencia si nuestro medio de trasporte dispone de dos, tres o cuatro ruedas.
Sin entrar en demasiados tecnicismos, sí es cierto que cada vez son más las personas que, debido al exceso de tráfico en la gran ciudad y a la falta de experiencia en conducción de motos o scooters, sufren un accidente de circulación. Es justo a partir de ese momento cuando se activa dicho detonante y algo que hasta ese momento era práctico y divertido se convierte en todo un calvario.
Pero no sólo le ocurre a gente inexperta y en centros urbanos. Quién no ha escuchado en alguna ocasión decir: “Desde que me hice un recto en una curva subiendo a…, ya no disfruto como antes cuando salgo a rodar con los amigos”. Es por ello que los profesionales de CSM Escuela de Conducción llevan dos años impartiendo unos cursos personales que ayudan a los alumnos con este tipo de fobia a salir de una situación tan desagradable como peligrosa.