CASCOS MODULARES

PROTEGE TU CABEZA

Con la llegada del otoño debemos revisar nuestro equipamiento. De manera especial, el casco. Y reemplazarlo si no se encuentra en buen estado. Sin duda, una interesante opción para protegernos es elegir un modelo modular. Si no estás familiarizado con él, te explicamos qué tener en cuenta a la hora de adquirirlo. ¡Toma nota!

En el mes de noviembre bajan las temperaturas y llegan las lluvias otoñales. Llegado este momento, algunos usuarios estacionales consideran que ya empieza a hacer mucho frío para circular sobre dos o tres ruedas y sumirán a sus motocicletas o escúteres en un triste e incomprensible letargo invernal. Pero el resto de motoristas seguiremos disfrutando del mejor medio de transporte para uso diario y de ocio en esta recta final del año.

REVISIÓN DEL CASCO
Y para hacerlo con seguridad, tendremos que prestar especial atención a nuestro casco. ¿Cuenta ya con alguna caída? ¿Se adapta bien a la cabeza? ¿La correa de ajuste y el cierre se encuentran en perfecto estado? ¿A través de la pantalla vemos de forma nítida? ¿En su interior hay una lámina antivaho para no tener problemas de empañamiento?
Sin duda alguna, el otoño es buen momento para plantearnos si la única prenda obligatoria para poder circular en moto por la vía pública, y la más importante en caso de accidente, está en óptimas condiciones de uso.

CASCOS MODULARES
En esta ocasión vamos a centrarnos en el modelo que más adeptos ha captado en las dos últimas décadas: el casco modular o abatible. Entre ellos, los integrantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad motorizados debido la comodidad y facilidad que aporta a la hora de tener que comunicarse con otras personas, sean estas conductores o peatones.
Pero, ¿qué debemos tener en cuenta a la hora de elegir nuestro próximo casco modular? En primer lugar, es importantísimo verificar que se ajusta lo mejor posible a todo el contorno de nuestra cabeza –si es necesario, consulta a un profesional del establecimiento al que acudas–. Y también se tiene que valorar el confort; me refiero al acolchado interior, el nivel de insonorización en marcha, el campo de visión periférica y el sistema de ventilación. Y no menos relevante: recuerda que los colores oscuros son menos visibles para el resto de usuarios de la vía y dan más calor en verano.
Por último, no olvides que, además de utilizar un casco de calidad, es fundamental circular a una velocidad adecuada y saber controlar tu motocicleta en tiempo y forma. En este sentido, participar en un curso de conducción segura te ayudará a evitar posibles accidentes.

SOMNOLENCIA EN MOTO

Entre el 15% y el 30% de los accidentes de tráfico en España están causados, directa o indirectamente, por la somnolencia. Y sus efectos no solamente se manifiestan por la noche. Durante el día, muchos siniestros están provocados por la falta de sueño. Si quieres conducir seguro, ¡toma nota de estos consejos!

Los expertos en salud son concluyentes: dormir bien y descansar es fundamental para que el cuerpo y el cerebro se recuperen del estrés diario. Tras una buena noche de sueño, por la mañana nos encontramos mucho mejor y preparados para realizar cualquier actividad. Como, por ejemplo, disfrutar de nuestra querida compañera de aventuras. ¡No es para tomárselo a broma!

¿CÓMO NOS AFECTA?

Y es que, por mucho que tratemos de evitarlo, los efectos de la somnolencia son realmente peligrosos para la seguridad vial. En este sentido, desde la Dirección General de Tráfico (DGT) advierten que no dormir lo suficiente se traduce en un incremento del tiempo de reacción al manillar. Asimismo, provoca que estemos menos concentrados y, por lo tanto, más distraídos.

De igual manera, el sueño afecta a la toma de decisiones, contribuye a que los movimientos sean más lentos y automatizados, altera las funciones sensoriales –de manera especial, afecta a la visión–, favorece la aparición de microsueños y genera cambios en el comportamiento: la somnolencia nos vuelve más agresivos y es la responsable de que practiquemos una conducción más arriesgada.

¿CÓMO COMBATIRLA?

En cuanto a cómo combatirla, los profesionales aconsejan, para empezar, dormir entre siete y ocho horas, así como evitar conducir entre las 3 y las 5 de la madrugada y entre las 2 y las 4 de la tarde, ya que son consideradas las horas más peligrosas en materia de seguridad vial.

Del mismo modo, ante los primeros síntomas de somnolencia es importante parar y echar una cabezada de 20 o 30 minutos, así como detenerse y descansar ese mismo tiempo cada dos horas o 200 kilómetros en los viajes largos. Además, antes de conducir no es buena idea ingerir comidas copiosas y alcohol ni practicar actividades que provoquen fatiga. Por último, conviene saber que los efectos del cansancio son más intensos en conductores mayores, quienes deben extremar las precauciones y detenerse más a menudo.


PIE DE FOTO: Con el objetivo de prevenir la somnolencia, deben evitarse los desplazamientos nocturnos en moto. De manera especial, los expertos en seguridad vial desaconsejan conducir entre las 3 y las 5 de la madrugada.

Nueve minutos sin parpadear

Según un estudio realizado por el laboratorio oftalmológico Sifi y el equipo de Lucio Cecchinello, los pilotos de MotoGP parpadean mucho menos que sus compañeros de Moto2 y Moto3. Concretamente, pueden estar hasta nueve minutos sin parpadear. Además, después de tanto tiempo sin cerrarlos, ningún piloto parece sufrir sequedad, enrojecimiento, inflamación o irritación en los ojos. Al parecer, ello se debe a que su líquido lagrimal es rico en lípidos. De esta manera, la película lagrimal del ojo no se rompe y no tienen que parpadear. Interesante, ¿verdad?